Os entiendo, pero esto es como todo, cuestión de gustos, de usabilidad y de practicidad, o de afición. Yo haría algunos matices, solo me gusta un cambio manual, tanto en motos como en coches, si el cambio es bueno, de tacto rápido, mecánico, que notas perfectamente el enclavamiento de las marchas, el poner el punto muerto (en motos obviamente)... Si el cambio es uno de tacto mediocre, de tacto gomoso y largo recorrido, lentorro, prefiero mil veces antes un DSG o uno de convertidor de par, es cómodo, es rápido, tienes la opción de cambiar con levas, nunca se cala, aún en situaciones de alto riesgo como pasos a niveles, arrancadas en rampa, en fin, solo le veo ventajas. Ahora bien, si me pones delante un Mazda MX5 con su exquisito cambio manual y su motor atmosférico de 7.000 rpm, evidentemente, no hay color, eso es un aparato para disfrutar de conducir.
Con las motos, lo mismo, pero reitero lo de la usabilidad. O eres muy buen piloto y muy rápido cambiando de marchas, o un piloto más mediocre con una TMAX, o similar te va a fundir, sencillamente porque el motor va a trabajar siempre en su zona de par máximo porque ya el CVT se encarga de ello. Muchos me entenderéis porque lo habréis comprobado tanto lo anterior, como en cualquier semáforo, donde un scooter de 300 te cruje en arrancada a cualquier moto standard (excepto las que cogen los 100 en 1ª), a no ser que le saques las bielas por el cárter, y seas muy, MUY rápido con los cambios de marcha, por no hablar de lo ya mencionado, nunca se te va a calar, nunca te va a dejar tirado en una curva, o en una cuesta porque elegiste la marcha equivocada, o vas a acelerar peor, porque tenías que haber bajado dos marchas más rápido...
En fin, lo dicho, que sobre gustos... Luego ya hay interesantes opciones intermedias como el nuevo E-Clucht de Honda, que monta la CB650R en el que solo manejas la palanca, pero no la maneta de embrague, y el nuevo Y-AMT de Yamaha que parece un cambio robotizado, porque no es ni como el E-Clucht de Honda, ni como el DCT de doble embrague, pero no lleva tampoco maneta de embrague.
Hablando ya un poco en futuro, conforme pasen los años, y si sigo con las motos, lo más probable es que termine con una de estas con cambio automático, o un scooter, o si me retiro totalmente de las motos, con el vehículo mencionado antes, un Mazda MX5, que me parece el prototipo de coche de capricho para disfrutar de la conducción y encima descapotable.