La Yamaha WR 125 R es una moto polivalente o mixta, off-road urbana según la marca y desde trail campera hasta shoft enduro, según en que publicación lo miréis. Vamos que sirve tanto para asfalto como para fuera del mismo, con mayor o menor predilección por uno u otro según los neumáticos que le pongas; con los que me trae, unos Michelin Sirac, prefiere claramente asfalto y caminos sin dificultades.
El motor es lo mejor de esta moto: un SOHC 124 cc, 4 válvulas, refrigerado por agua a inyección, una autentica gozada para la conducción por cualquier tipo de vía, salvo para las autovías con un límite de 120 km/h a los que si llega puntualmente, pero que no se pueden mantener; vas oscilando de los 100 a los 125 cuesta arriba /abajo, en llano sobre 115 de máxima. Gracias a la gran longitud de su escape goza de buenos bajos, estira bien cada una de sus 6 velocidades lo que le da una sensación de aceleración que al final termina con un tironcillo tan agradable como adictivo.
Me recuerda bastante a los motores de las 2t de 75 cc con las que soñaba de chaval.
La inyeccion electrónica le confiere una gran facilidad de arranque y uso (es imposible ahogarla aunque la pongas a todo puño, cuesta arriba, en una marcha larga) y tiene un consumo medio comedido, de 3 l. a los 100, ya rodados los primeros 3.000 km con ella. El depósito tiene capacidad para 8,5 l: con unos 7 litros que le suelo echar (10 €) tengo autonomía para 230 km.
El sonido es un ronroneo, o especie de ronquido muy apagado tanto que los días de fuerte viento, casi todos por aquí, ni la oigo y como no lleva ni cuentavueltas, te toca cambiar por pura intuición; pero no hay problema porque el motor es tan elástico que enseguida se recupera de cualquier error.
La estética es otro de sus puntos fuertes, va girando cabezas allá por donde va: cuando volvía de Asturias paré en un semáforo y una mujer que cruzaba se distrajo tanto mirándola que tropezó con el bordillo y calló todo lo larga que era ¡no se pueden hacer tan wapas, son un peligro! no pasa desapercibida su altura imponente: con sus 93 cm al asiento no intentéis subiros con un vaquero ajustado, que os vais a dejar la rodilla en el tubarro... os lo digo yo. Por el lado positivo esto permite que una vez subido la posición de las piernas sea muy relajada (rodillas en ángulo recto), espalda bien recta.
Y no os preocupéis demasiado por la estatura, que las suspensiones ceden con el peso del piloto y a partir de 1,80 de estatura se apoya en el suelo con las dos plantas. Pesa 133 kg con depósito lleno, y esto es mucho sobre todo porque al ir el motor en una posición elevada hace que el centro de gravedad sea alto y no veais a que velocidad cae al suelo (ya me he abierto la muñeca dos veces de sujetarla para evitar la típica caida tonta en parado), y esto también le quita bastante agilidad endurera; pero por carreteras reviradas es muy divertido ir tumbándola de un lado a otro; y además tiene un gran aplomo y estabilidad por asfalto incluso por encima de los 100 km/h. Algo que me llama poderosamente la atención es que, a pesar de lo alto que vas, el viento racheado lateral ni te desvía un mm de tu trayectoria.
Esta estabilidad prodigiosa se la dan sus ruedas altas y finas de campo: 21'' delante y 18'' detrás con frenos de disco lobulados en ambas que ofrecen muy buen tacto y frenadas muy precisas que dan mucha seguridad ante eventuales emergencias (ya me ha tocado clavar ruedas por carretera de 80-90 a 0 y me ha sobrado espacio en comparación con los coches ¡ojito a los de atrás!). Las suspensiones tienen un amplio recorrido de 240 y 230 mm, la horquilla es más que suficiente pero al monoamortiguador trasero es fácil hacerle tope en cuanto encadenas unos cuantos baches consecutivos, he leído que se soluciona regulando la precarga, que trae 7 posiciones, a la penúltima más dura y quitando presión a los neumáticos cuando salgas por caminos complicados. Para lo que en cambio es una auténtica gozada es para “flotar” sobre los badenes, baches y demás obstáculos de la ciudad.
Las estriberas son metálicas, muy chulas, para ambos conductor y pasajero, sin goma por lo que vibras con la moto, pero es soportable, y ya acostumbrado no me doy ni cuenta.
El asiento se estrecha hacia delante y se sube sobre el depósito lo que permite maniobrar de forma muy intuitiva con las piernas juntas (como en bicicleta) y echar el pie a tierra con facilidad, e incluso ir remando con los pies en zonas difíciles sin dejarte la virilidad en el intento; pero a cambio se reduce la superficie de apoyo especialmente en su parte delantera lo que hace que los primeros viajes largos por carretera sean eternos y no dejes de hacer paradas a “enfriar el motor” que como va refrigerado por agua, ni puñetera la falta que le hace... pero te acostumbras y te llega a parecer hasta cómodo su tacto duro pero flexible; y ya me he hecho sin problemas un viaje de 7 horas con ella, gozando cada minuto. A mi mujer ya le parecía bien cómodo desde el primer día, y ahora siempre quiere venir conmigo, y eso que siempre le han dado pavor las motos. Asi que le estoy muy agradecido a la “wapina” por ayudarme con este caso tan recalcitrante de “motofobía”. El truco creo yo que es ir bien pegado en el mismo asiento con alguien que disfruta tanto de las motos como yo, y claro la suavidad de su motor y lo bien escalonadas que están sus 6 marchas que te permite ir sin brusquedades en cualquier situación.
La recomiendo para los amantes del motoexcursionismo tranquilo de cualquier edad a partir de los 16, para moverse por campo, pueblos, ciudades (incluso en el día a día) y por todo tipo de carreteras y caminos.
Lo que menos me gusta es que no mantenga una velocidad de 120 km/h para poder hacer con desahogo esos km de autovía que muchas veces te pueden ahorrar situaciones peores (cuellos de botella, atascos, rectas interminables de un carril plagadas de camiones...) pero aún se tiene que soltar del todo el motor, y no pierdo la esperanza...
Por si me lee alguien de yamaha, mi número de cuenta es xxxx xxxx xx xxxxxxxxxx, intento encontrarle defectos de manera objetiva, pero no puedo: “toy namorao”, y mira que soy consciente de que le faltan un montón de cosas, y otras muchas se podrían mejorar... pero a mi me sobran: ¡es que es una señora moto, sin pijadas, como a mí me gustan!
De la web de Yamaha:
Motor
Tipo de motor
refrigerado por líquido, 4 tiempos, SOHC, 4 válvulas,
Un cilindro inclinado hacia adelante
Cilindrada 124.7 cc
Diámetro x carrera 52,0 mm x 58,6 mm
Relación de compresión 11.2 : 1
Potencia máxima 11 kW (15PS) @ 9,000 rpm
Par máximo 12.2 Nm (1.24 kgm) @ 8,000 rpm
Sistema de lubricación Cárter húmedo
Tipo de embrague Húmedo, Multidisco con muelle en espiral
Carburador Inyección electrónica de combustible
Sistema de encendido TCI (digital)
Sistema de arranque Eléctrico
Sistema de transmisión Toma constante, 6 velocidades
Transmisión final Cadena
Chasis
Chasis Doble cuna de acero
Sistema de suspensión delantera Horquillas telescópicas
Recorrido delantero 240 mm
Ángulo de avance del pivote 27o
Avance del pivote 107 mm
Sistema de suspensión trasera Brazo oscilante, (suspensión tipo eslabón),
Amortiguador único
Recorrido trasero 107 mm
Freno delantero Disco único hidráulico, Ø 240 mm
Freno trasero Disco hidráulico único, Ø 220 mm
Neumático delantero 80/9021 M/C 48P (con cámara)
Neumático trasero 110/8018 M/C 58P (con cámara)
Dimensiones
Longitud total 2,180 mm
Anchura total 835 mm
Altura total 1,220 mm
Altura del asiento 930 mm
Distancia entre ejes 1,430 mm
Distancia mínima al suelo 265 mm
Peso (incluidos depósito de aceite y depósito de combustible llenos)
133 kg
Capacidad del depósito de combustible 8.5 litros
Capacidad del depósito de aceite 1.15 litros