LeDrof
Well-Known Member
Buenas noches
Lo primero, un saludo tras unas semanas desconectado (mudanza, líos varios, el PC en una caja sin montar...).
Entrando en el tema del título: cómo todos sabemos, en los últimos años, el mercado de las motocicletas, y en especial el de la baja cilindrada, se ha visto inundado de una variopinta (al menos en apariencia) oferta de motos diseñadas y fabricadas por empresas chinas, bajo los dudosos estándares de la industria de ese país. Son motocicletas de estética llamativa, con muchas variaciones en apariencia y vendidas bajo surtidas marcas comerciales, tanto nuevas cómo viejas conocidas que han sido recompradas por terceras, o bien han decidido prostituir su imagen a costa de vender cuatro motos más sin apenas margen de beneficio.
El negocio que pueda dar ese modelo es mantener un precio de venta muy bajo, y para sacar algo de beneficio en esa circunstancia, necesitan vender mucho y producir barato.
Se vende mucho por precios de derribo, en especial en las cilindradas de acceso, para competir con el mercado de moto usada, a priori atractivo para el conductor novato que aún no sabe hasta qué punto le gusta el tema de las dos ruedas, o el estilo de moto que será más acorde a sus necesidades personales. Estéticas efectistas y variadas para animar la compra pasional, con la idea de ser una inversión poco arriesgada dado el reducido coste de compra.
Se fabrica barato porque se usan diseños anticuados, que fabricantes de vanguardia han desechado en la evolución a mejores eficiencias (normas EURO de contaminación). Esa falta de eficiencia se suple de alguna manera con una electrónica de baja calidad, nada fiable y que funciona a base de sacrificar eficacia (respuesta de la moto, prestaciones de propulsión). Además sacrifican la ventaja de la fiabilidad de esos diseños vetustos al usar materiales y tolerancias de fabricación que en Europa serían totalmente inaceptables. El único requisito técnico del producto es que la mayoría de unidades consigan llegar a los dos años de vida antes de dar problemas realmente graves... y para solucionar los que surjan, fabrican unas cuantas motos de más, que total, con lo baratas que salen, es más fácil y barato que armar una infraestructura para proveer de los recambios necesarios para que una moto dure muchos años en servicio.
Al ser productos que se venden por capricho estético, también es probable que los modelos no extiendan su producción demasiado tiempo, para poder adaptar el producto rápidamente a la demanda del mercado. Y al venderse estas motos bajo el paraguas de marcas comerciales sin una reputación que defender, nada pierden por la baja calidad, pues a los X años las motos se venderán bajo una nueva marca, y listo.
La moto se embala, se mete en un contenedor y al cabo de un mes llega a Europa. La terminan de montar en el taller de Fulano, que se ha hecho concesionario de la marca chinorris cómo quien se saca el tíquet de la zona azul, y que tiene 0 experiencia con ese modelo en concreto. Lo monta cómo le parece, teniendo en la mano un manual del fabricante que da pena (seguramente hasta mal traducido por algún software online) y con poco esmero, ya que total, por cuatro perras que sacará y que poco mantenimiento hará a una moto "de paseo"...
Aquí llega el paisano, seguramente novato en el mundillo, que se ha enamorado de una motillo guapísima y a un precio realmente atractivo. El problema le viene cuando a los pocos días se le aflojan tornillos, le tira líquidos raros por debajo, la electrónica hace de las suyas, o se encienden testigos random en el cuadro, y en el taller no saben por dónde cogerlo, no tienen formación, experiencia, software ni recambios para dar un servicio postventa en condiciones. Eso si, revisiones cada 3.000km y su buen cambio de aceite (o eso le pondrá en la factura, a saber si realmente le harán algo más que echar un vistazo).
Bien, pues así de claro lo digo: no comprar esta mierda.
Y cuando digo esta mierda, es esto a lo que me refiero:
Así es, no compréis la mierda de moto que compré yo. Y digo que es una mierda con conocimiento de causa, que le metí más mano el primer año de tenerla que al 4x4 que tuve ocho años (y eso que hacía off-road con él).
Llevo dos años culpabilizándome por "cagadas" que terminaban con tornillos rotos, pero esta vez, tras tres mese con la moto parada por una puta rosca barrida, con mis herramientas de contrastada solvencia, me percaté de que el tornillo no roscaba bien en la rosca reparada. Era un tornillo de repuesto, que el original se partió en mis manos al apretar sin dinamométrica en su día. Se me ocurrió probar con el otro tornillo, original que veían con la moto cuando salió del concesionario... y tampoco roscaba bien. saqué mis terrajas, y efectivamente: a pesar de ser tornillería de métrica 6 estándar supuestamente, la terraja tuvo que llevar el hilo de la rosca por el buen camino para que entraran cómo es debido.
Es decir, que además de mecanizar mal las piezas de la distribución (ahí cascó otro tornillo por el esfuerzo de cizallamiento extra, no porque yo lo apretara mal), Rieju se permite el lujo añadido al hecho de comprar motos de calidad china y venderlas bajo su nombre, comprar una moto cuyo fabricante escatima hasta en la calidad de los tornillos, con lo que al meterlos el cuerpo del motor, que es de aluminio, deforma su rosca y se amolda al tornillo defectuoso... siempre que no no tengas que estar metiendo y sacando, porque entonces se te barre la rosca, y no te sirve ni el tornillo original, ni ese tornillo se acopla a la nueva rosca rehecha Sin saberlo, al poner un tornillo provisional "de montar estanterías" (se usó esa expresión en este foro) le estaba haciendo un favor a la moto, y mi error fue comprar uno de recambio oficial.
Mi recuento hasta la fecha: tornillos partidos 2, roscas barridas 1, tensores de cadenilla rotos 2, mecanizados de fábrica corregidos por el menda 1, grapas del carenado partidas sin motivo aparente 1
Y me queda compara y cambiarle un balancín, que tiene un rodamiento defectuoso. Si no he mandado a la mierda la moto en estos últimos meses ha sido porque ya le tenía comprados repuestos de muchas cosas, pero hasta la ilusión se me estaba quitando.
En fin, perdón por el tocho terapéutico, pero lo necesitaba. Recordad que no tienen vergüenza a la hora de vendernos mierda.
Ahí una buena noticia: la moto ya arranca sin echar aceite por ahí. Espero esta semana hacerme la primera ruta del año (espero acordarme de cómo se llevan las motos ).
Nos vemos en la carretera. ¡Gas!
Lo primero, un saludo tras unas semanas desconectado (mudanza, líos varios, el PC en una caja sin montar...).
Entrando en el tema del título: cómo todos sabemos, en los últimos años, el mercado de las motocicletas, y en especial el de la baja cilindrada, se ha visto inundado de una variopinta (al menos en apariencia) oferta de motos diseñadas y fabricadas por empresas chinas, bajo los dudosos estándares de la industria de ese país. Son motocicletas de estética llamativa, con muchas variaciones en apariencia y vendidas bajo surtidas marcas comerciales, tanto nuevas cómo viejas conocidas que han sido recompradas por terceras, o bien han decidido prostituir su imagen a costa de vender cuatro motos más sin apenas margen de beneficio.
El negocio que pueda dar ese modelo es mantener un precio de venta muy bajo, y para sacar algo de beneficio en esa circunstancia, necesitan vender mucho y producir barato.
Se vende mucho por precios de derribo, en especial en las cilindradas de acceso, para competir con el mercado de moto usada, a priori atractivo para el conductor novato que aún no sabe hasta qué punto le gusta el tema de las dos ruedas, o el estilo de moto que será más acorde a sus necesidades personales. Estéticas efectistas y variadas para animar la compra pasional, con la idea de ser una inversión poco arriesgada dado el reducido coste de compra.
Se fabrica barato porque se usan diseños anticuados, que fabricantes de vanguardia han desechado en la evolución a mejores eficiencias (normas EURO de contaminación). Esa falta de eficiencia se suple de alguna manera con una electrónica de baja calidad, nada fiable y que funciona a base de sacrificar eficacia (respuesta de la moto, prestaciones de propulsión). Además sacrifican la ventaja de la fiabilidad de esos diseños vetustos al usar materiales y tolerancias de fabricación que en Europa serían totalmente inaceptables. El único requisito técnico del producto es que la mayoría de unidades consigan llegar a los dos años de vida antes de dar problemas realmente graves... y para solucionar los que surjan, fabrican unas cuantas motos de más, que total, con lo baratas que salen, es más fácil y barato que armar una infraestructura para proveer de los recambios necesarios para que una moto dure muchos años en servicio.
Al ser productos que se venden por capricho estético, también es probable que los modelos no extiendan su producción demasiado tiempo, para poder adaptar el producto rápidamente a la demanda del mercado. Y al venderse estas motos bajo el paraguas de marcas comerciales sin una reputación que defender, nada pierden por la baja calidad, pues a los X años las motos se venderán bajo una nueva marca, y listo.
La moto se embala, se mete en un contenedor y al cabo de un mes llega a Europa. La terminan de montar en el taller de Fulano, que se ha hecho concesionario de la marca chinorris cómo quien se saca el tíquet de la zona azul, y que tiene 0 experiencia con ese modelo en concreto. Lo monta cómo le parece, teniendo en la mano un manual del fabricante que da pena (seguramente hasta mal traducido por algún software online) y con poco esmero, ya que total, por cuatro perras que sacará y que poco mantenimiento hará a una moto "de paseo"...
Aquí llega el paisano, seguramente novato en el mundillo, que se ha enamorado de una motillo guapísima y a un precio realmente atractivo. El problema le viene cuando a los pocos días se le aflojan tornillos, le tira líquidos raros por debajo, la electrónica hace de las suyas, o se encienden testigos random en el cuadro, y en el taller no saben por dónde cogerlo, no tienen formación, experiencia, software ni recambios para dar un servicio postventa en condiciones. Eso si, revisiones cada 3.000km y su buen cambio de aceite (o eso le pondrá en la factura, a saber si realmente le harán algo más que echar un vistazo).
Bien, pues así de claro lo digo: no comprar esta mierda.
Y cuando digo esta mierda, es esto a lo que me refiero:
Así es, no compréis la mierda de moto que compré yo. Y digo que es una mierda con conocimiento de causa, que le metí más mano el primer año de tenerla que al 4x4 que tuve ocho años (y eso que hacía off-road con él).
Llevo dos años culpabilizándome por "cagadas" que terminaban con tornillos rotos, pero esta vez, tras tres mese con la moto parada por una puta rosca barrida, con mis herramientas de contrastada solvencia, me percaté de que el tornillo no roscaba bien en la rosca reparada. Era un tornillo de repuesto, que el original se partió en mis manos al apretar sin dinamométrica en su día. Se me ocurrió probar con el otro tornillo, original que veían con la moto cuando salió del concesionario... y tampoco roscaba bien. saqué mis terrajas, y efectivamente: a pesar de ser tornillería de métrica 6 estándar supuestamente, la terraja tuvo que llevar el hilo de la rosca por el buen camino para que entraran cómo es debido.
Es decir, que además de mecanizar mal las piezas de la distribución (ahí cascó otro tornillo por el esfuerzo de cizallamiento extra, no porque yo lo apretara mal), Rieju se permite el lujo añadido al hecho de comprar motos de calidad china y venderlas bajo su nombre, comprar una moto cuyo fabricante escatima hasta en la calidad de los tornillos, con lo que al meterlos el cuerpo del motor, que es de aluminio, deforma su rosca y se amolda al tornillo defectuoso... siempre que no no tengas que estar metiendo y sacando, porque entonces se te barre la rosca, y no te sirve ni el tornillo original, ni ese tornillo se acopla a la nueva rosca rehecha Sin saberlo, al poner un tornillo provisional "de montar estanterías" (se usó esa expresión en este foro) le estaba haciendo un favor a la moto, y mi error fue comprar uno de recambio oficial.
Mi recuento hasta la fecha: tornillos partidos 2, roscas barridas 1, tensores de cadenilla rotos 2, mecanizados de fábrica corregidos por el menda 1, grapas del carenado partidas sin motivo aparente 1
Y me queda compara y cambiarle un balancín, que tiene un rodamiento defectuoso. Si no he mandado a la mierda la moto en estos últimos meses ha sido porque ya le tenía comprados repuestos de muchas cosas, pero hasta la ilusión se me estaba quitando.
En fin, perdón por el tocho terapéutico, pero lo necesitaba. Recordad que no tienen vergüenza a la hora de vendernos mierda.
Ahí una buena noticia: la moto ya arranca sin echar aceite por ahí. Espero esta semana hacerme la primera ruta del año (espero acordarme de cómo se llevan las motos ).
Nos vemos en la carretera. ¡Gas!