DL665
Active Member
Hola compis, ultimamente no me asomo tanto como me gustaria por el foro, y por eso os dejo una pequeño articulo de mi blog que seguro a mas de uno os traiga recuerdos de tiempos pasados -
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Lleva tiempo rondándome la cabeza este tema.
Pensaba en como la industria del ciclomotor ha ido cada vez mas apagándose y lo que antaño fue uno de los sectores de la moto que mas vida tenían, hoy no resulta mas que testimonial.
La obligatoriedad de pasar ITVs, los restrictivas normativas anti contaminación, y legislativas que limitan su velocidad a 45 Km/h...ademas de la subida de edad de obtención de la Licencia (hoy día Permiso AM), a los 15 años, cuando esperando un año mas, ya puedes acceder al A1 (125cc/15cv), son, entre otros, los grandes causantes del declive de este tipo de motos.
En este articulo voy a hacer un pequeño regreso al pasado reciente, en el que aun sin haber formado parte de forma directa, si que fueron vivencias de la epoca final y dorada de estas pequeñas monturas, poco antes de la entrada en vigor de las causas antes mencionadas.
Este es mi tributo a las motos que a muchos adolescentes de mi generación (y quizá de las actuales), aquellas que nos quitaban el sueño.
Viajamos a una época de estudiante de secundario. Son finales de los '90. Poco a poco se acerca la fecha entonces lejana, ahora muy cerca de empezar un nuevo milenio con gran expectación.
Los estudiantes hablan de elementos que hoy día son bastante raros de oír, e invierten la mayoría de su paga y tiempo en ellos:
"Top Rosa", rotor, cárter limado, panza abierta y vaciada, Dell'orto de 24, calimero, rodillos ligeros...
Viernes, salida de clase. Los imberbes adolescentes ponen a calentar sus "chicharras" de 2 tiempos mientras apuran el cigarro y se enfundan un casco replica de Valentino Rossi u otro piloto popular.
En una algarabía de ruido ensordecedor abandonan el recinto escolar, poniendo rumbo a casa a reponer fuerzas y emplear el tiempo libre en la caseta o garaje. El trucaje estaba a la orden de dia.
El trucaje permitió a muchos aprender mecanica.
Es fin de semana, un tranquilo polígono industrial a las afueras de la localidad, en el que apenas hay actividad, ve turbada su calma con un agudo sonido que se acerca. Y tras él otro. Y otro y otro.
Se empieza a hacer un pequeño corro de gente: compañeros, amigos, colegas, curiosos, gente un poco mas mayor...
Scooters llamativos y de todos los tamaños, enduros reconvertidas a supermotards, deportivas con elaborados carenados replica o sin ellos para aligerar el conjunto. La variedad de motitos es de lo mas interesante y el ambiente festivo y amigable, pero también de desafió y competitividad.
Dos monturas se alinean en la entrada a la gran avenida desierta del polígono.
Alguien los observa a ambos desde en medio del asfalto.
Ellos a él atentamente, con la primera marcha engranada y los nervios a flor de piel.
El chico baja los brazos y los motores se revolucionan, los escapes braman y expulsan nubes de oloroso humo blanco, mientras se alejan a gran velocidad del núcleo de gentío.
Los "piques" por ver quien tiene la "49" mas rápida se suceden, mientras alguien recibe una llamada.
Sin perder el tiempo avisa alterado al resto de la muchedumbre a gritos.
De forma apresurada, improvisados paquetes se montan en las motos de compañeros, los caballetes son quitados y el lugar se abandona de forma desordenada ante la inminente llegada de la Autoridad.
Algunos tendrán mas suerte que otros en su marcha del emplazamiento, en busca de otro lugar en el que re-encontrarse.
Comunes y rapidas:
Beta Ark, Yamaha Jog, Piaggio Typhoon
Aprilia SR, Honda Scoopy.
Con toda probabilidad, habrán ido a la carretera menos transitada de la comarca, a seguir disfrutando de su humilde moto, de las vistas y las curvas, y a ver a los mas experimentados intentando emular a sus ídolos de los Grandes Premios, tumbando la moto y sacando rodilla o pie.
Con toda probabilidad habrá algún arrastrón, pero tras el disgusto inicial y las magulladuras, entre todos le echaran un cable y la moto volverá a estar lista para el fin de semana siguiente.
El sueño humedo de los quemados:
Derbi GPR, Aprilia RS, Rieju RS2
Honda NSR, Yamaha TZR
Espero que os haya gustado, ¡un saludo!
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Lleva tiempo rondándome la cabeza este tema.
Pensaba en como la industria del ciclomotor ha ido cada vez mas apagándose y lo que antaño fue uno de los sectores de la moto que mas vida tenían, hoy no resulta mas que testimonial.
La obligatoriedad de pasar ITVs, los restrictivas normativas anti contaminación, y legislativas que limitan su velocidad a 45 Km/h...ademas de la subida de edad de obtención de la Licencia (hoy día Permiso AM), a los 15 años, cuando esperando un año mas, ya puedes acceder al A1 (125cc/15cv), son, entre otros, los grandes causantes del declive de este tipo de motos.
En este articulo voy a hacer un pequeño regreso al pasado reciente, en el que aun sin haber formado parte de forma directa, si que fueron vivencias de la epoca final y dorada de estas pequeñas monturas, poco antes de la entrada en vigor de las causas antes mencionadas.
Este es mi tributo a las motos que a muchos adolescentes de mi generación (y quizá de las actuales), aquellas que nos quitaban el sueño.
Viajamos a una época de estudiante de secundario. Son finales de los '90. Poco a poco se acerca la fecha entonces lejana, ahora muy cerca de empezar un nuevo milenio con gran expectación.
Los estudiantes hablan de elementos que hoy día son bastante raros de oír, e invierten la mayoría de su paga y tiempo en ellos:
"Top Rosa", rotor, cárter limado, panza abierta y vaciada, Dell'orto de 24, calimero, rodillos ligeros...
Viernes, salida de clase. Los imberbes adolescentes ponen a calentar sus "chicharras" de 2 tiempos mientras apuran el cigarro y se enfundan un casco replica de Valentino Rossi u otro piloto popular.
En una algarabía de ruido ensordecedor abandonan el recinto escolar, poniendo rumbo a casa a reponer fuerzas y emplear el tiempo libre en la caseta o garaje. El trucaje estaba a la orden de dia.
El trucaje permitió a muchos aprender mecanica.
Es fin de semana, un tranquilo polígono industrial a las afueras de la localidad, en el que apenas hay actividad, ve turbada su calma con un agudo sonido que se acerca. Y tras él otro. Y otro y otro.
Se empieza a hacer un pequeño corro de gente: compañeros, amigos, colegas, curiosos, gente un poco mas mayor...
Scooters llamativos y de todos los tamaños, enduros reconvertidas a supermotards, deportivas con elaborados carenados replica o sin ellos para aligerar el conjunto. La variedad de motitos es de lo mas interesante y el ambiente festivo y amigable, pero también de desafió y competitividad.
Dos monturas se alinean en la entrada a la gran avenida desierta del polígono.
Alguien los observa a ambos desde en medio del asfalto.
Ellos a él atentamente, con la primera marcha engranada y los nervios a flor de piel.
El chico baja los brazos y los motores se revolucionan, los escapes braman y expulsan nubes de oloroso humo blanco, mientras se alejan a gran velocidad del núcleo de gentío.
Los "piques" por ver quien tiene la "49" mas rápida se suceden, mientras alguien recibe una llamada.
Sin perder el tiempo avisa alterado al resto de la muchedumbre a gritos.
De forma apresurada, improvisados paquetes se montan en las motos de compañeros, los caballetes son quitados y el lugar se abandona de forma desordenada ante la inminente llegada de la Autoridad.
Algunos tendrán mas suerte que otros en su marcha del emplazamiento, en busca de otro lugar en el que re-encontrarse.
Comunes y rapidas:
Beta Ark, Yamaha Jog, Piaggio Typhoon
Aprilia SR, Honda Scoopy.
Con toda probabilidad, habrán ido a la carretera menos transitada de la comarca, a seguir disfrutando de su humilde moto, de las vistas y las curvas, y a ver a los mas experimentados intentando emular a sus ídolos de los Grandes Premios, tumbando la moto y sacando rodilla o pie.
Con toda probabilidad habrá algún arrastrón, pero tras el disgusto inicial y las magulladuras, entre todos le echaran un cable y la moto volverá a estar lista para el fin de semana siguiente.
El sueño humedo de los quemados:
Derbi GPR, Aprilia RS, Rieju RS2
Honda NSR, Yamaha TZR
Espero que os haya gustado, ¡un saludo!