Fireball
Well-Known Member
Empiezo por las conclusiones:
Hacer un curso de conducción con tu propia moto me parece una idea brillante. Ya sabes llevarla, sin periodo de adaptación, sabes cómo responden el acelerador, los frenos, tienes controlado su peso, es tu moto. Además, y quizá más importante, es la moto que luego vas a conducir, "para la que haces el curso", por lo que todo lo que aprendes no lo tienes que extrapolar después y adaptar. Como contra, es tu moto, y al menos en mi caso en el nivel I estaba aterrorizado con caerme y romper el carenado. En el curso nivel II me sentí relajado en ese aspecto probablemente por el tamaño del circuito, con medidas "normales" como lo que te puedes encontrar en una carretera, y además ya había roto el hielo con el nivel I.
Tenía prejuicios con los cursos de conducción en general. Pensaba que no eran para mí, que era algo enfocado a gente que quiere pilotar y/o "motos gordas". También tenía prejuicios respecto a la gente que iría a esos cursos y temor sobre estar en situaciones de riesgo (innecesario) porque se picasen o intentaran llevar la moto a tope o al límite, y acabar teniendo un accidente en un entorno teóricamente controlado.
La realidad que me he encontrado ha sido radicalmente opuesta. También en el curso nivel I los compañeros iban con una actitud absolutamente enfocada a aprender (no a medirse con los demás, mi prejuicio) y durante el curso no hubo adelantamientos, ni maniobras extrañas o peligrosas, respeto entre todos en todo momento.
Quizá el planteamiento de estos dos cursos que yo he hecho es la clave, no son cursos de conducción deportiva sino conducción segura. En mi opinión es una línea finísima la que separa estos dos matices, porque los errores que he corregido y las habilidades desarrolladas con los cursos también me permiten ser más rápido si quiero hacer conducción deportiva porque en definitiva son las mismas que se aplican en ese estilo de conducción.
Estoy un poco arrepentido porque debido a mis prejuicios no hice cursos cuando tenía la 125cc. Y este es el punto en que más hincapié quiero hacer porque creo que cometí un error. De hecho en este curso además de mi CBR500R asistieron una CB500X y un MT-03 y me sorprendió para bien, porque (de nuevo prejuicios) yo pensaba que iba a ser la moto más pequeña y mira por donde, no.
Si os lo podéis permitir (y en particular si sois de la zona de Valencia o alrededores) creo que cualquiera en 125cc aprovecharía mucho mejor el nivel I que los que fuimos, y también le sacaríais partido al nivel II, donde podríamos haber acelerado hasta los 150km/h según comentaron los instructores, pero es que ese no era el objetivo (ni la actitud) que llevábamos los asistentes. Yo creo que no pasé de los 80 o 90km/h más que en algún acelerón en las vueltas libres y solo por tantear. Creo que con la Hyosung hubiese hecho más segunda-tercera y con la 500 en casi todos los tramos iba en segunda variando rpm y solo metiendo tercera en las zonas algo más rectas (pero para ir recto no hace falta un curso de conducción, creo yo).
Si ofertan cursos de conducción en vuestra zona, preguntad a gente que los haya hecho, buscad opiniones por internet o lanzaros directamente a hacerlos. No veo el punto donde no vayas a aprender o al menos pasar una mañana entretenida. Seguro que haré alguno de los de pit-bikes que "venden" con la foto tocando rodilla y todo eso (y volveré a contaroslo, por supuesto), pero me parecen menos atractivos. Y desde luego si tenéis oportunidad de hacer los de esta autoescuela (autoescuela Gran Vía 46, en Valencia), puedo deciros que estoy muy satisfecho con ambos cursos y no puedo menos que recomendarlos.
Ahora sí, al lío.
En cuanto publicaron las fechas disponibles para el curso de conducción nivel II contacté para reservar mi plaza, y según se acercaba el día previsto (10 de Abril), que me encajaba perfectamente en los planes, no paraba de llover día sí día también. Fue aplazado. Podía salir para otra fecha intermedia pero tampoco el clima acompañaba, así que finalmente el curso se realiza el sábado 08/05/2021 en el Kartódromo Internacional Lucas Guerrero.
Quedamos a las 07:30, así que fue un buen madrugón. Estaba algo nublado pero pintaba que iría despejando con el sol a lo largo de la mañana (y así fue). Como me gusta llegar sobrado de tiempo a los sitios, llegué de los primeros y ya empecé a ver las motacas de la gente, trail, naked, deportivas, del A, limitadas y adoseras puras.
Unas indicaciones básicas, un café para quien gustase y a empezar a calentar. Si no me cuelo contando, 13 motos en pista incluyendo los instructores pero la verdad que yo me centré en mi grupo (tres cursillistas y un instructor) y no me enteré mucho del resto porque nos separamos dentro del propio circuito.
Este es el circuito. Salíamos desde la "línea de meta" donde se ve pintada la "parrilla de salida" (en la foto, abajo). Recta y enfrentamos primera curva a derechas, amplia. Le sigue una curva a izquierda no muy pronunciada y la chicane infernal jajaja. Después otras dos curvas a derechas que se podían enlazar bien y tres curvas a izquierdas que también se podían llegar a enlazar casi de una trazada aprovechando toda la pista. Llegamos a las cuvas finales y pequeña recta de la pista que acaba en una curva rápida a derecha terminando en otra chicane (no infernal) y la recta de meta.
Iniciamos el curso haciendo unas vueltas de calentamiento y conociendo el circuito, y la verdad que salvo la chicane infernal que se me atragantó todas esas vueltas, el resto me resultó manejable. Es cierto que antes de tener ninguna de las indicaciones de los instructores esas tres curvas a izquierdas que se podían enlazar de una sola trazada yo no las hice tan fluidas, y también iba inconscientemente memorizando ahora viene curva de este lado, ahora del otro, etcétera.
(Se ve un poco rara porque estaba nublado y he corregido el brillo regular)
Cuando paramos y nos dijeron que qué tal la toma de contacto inicial me faltó tiempo para decir que la primera chicane me la comía con doble de patatas y que qué tenía que hacer ahí. De eso trataba el curso en definitiva, de encontrarse problemas y aprender a atacarlos, así como corregir vicios, postura, mirada . . .
La chicha del curso fue estar allí, desde luego, pero en definitiva el objetivo era el mismo que el nivel I, mejorar nuestra posición en la moto, sobretodo de brazos, hombros y torso, y en particular de la mirada-cabeza que es la que "manda" al resto. En ese aspecto (de acuerdo con Carlos, el instructor)(instagram) debí retener mucho del curso nivel I porque aunque todavía me agarraba más de lo debido con los brazos, la mirada y la posición del torso eran las indicadas.
Mejorar la trazada es lo que más estuvimos machacando, la entrada a curva, dónde iniciar la maniobra, la colocación "en el carril", así como retrasar la frenada y adecuar la velocidad para tener también una salida rápida de curva. Aquí hubo mucho trabajo y de forma alternante nos poníamos detrás de Carlos para seguirle y aplicar sus instrucciones, correcciones sobre la marcha y alguna parada puntual para comentar alguna de las curvas con más detalle.
LA vuelta. Hubo un momento en que nos distanciamos del resto de motos Carlos y yo, y ya debíamos llevar más de una hora de curso, en que conseguí hacer al menos esa vuelta siguiendo de forma bastante precisa su trazada, frenadas, entradas a curva y a nivel de sensaciones fue brutal. Me setía fuera de mí jajajaja, una gran satisfacción de estar aprendiendo y aplicando lo aprendido correctamente. De verdad espectacular esa vuelta a rueda y manteniendo la distancia.
Hicimos el ejercicio de frenadas de emergencia. Consiste en tener unas referencias con conos y frenar primero solo con el pedal de freno trasero, después solo con maneta de freno delantero y después con los dos (primero toque al trasero, seguido de toque al delantero y aumentando la presión progresivamente intentando además que no salte el ABS en mi caso). Se me da mal eso de separar freno trasero y delantero en la frenada de emergencia porque me sale hacer la frenada como corresponde de forma automática, así que este ejercicio no me gusta jajajaja.
También hicimos zigzag de conos, pero en esta ocasión con más separación y por tanto algo más rápido.
Y para complementar los ejercicios de habilidad, estuvimos haciendo ochos con estilo inglés, pero con unas medidas más amplias que en el nivel I, se me dio regular las primeras, luego mejor, más fluido, pero es algo a seguir practicando.
Teminamos la parte de pista y nos fuimos a almorzar (no se me ocurrió sacar fotos, y conforme comía me di cuenta que necesitaba reponer fuerzas), y después rutita por carretera con indicaciones, pero ya algo más relajado. Nos dimos una buena vuelta! Y esta vez alargamos la ruta 5 motos incluido Santi con una CB650 en esta ocasión. Es sorprendente como cambia saber enfrentar un tipo de curva después de haberlo aprendido y trabajado en el curso; ahora puedo hacer mucho más fluidas esas curvas cerradas de 180º de giro, sin corregir cuatro veces, ni llevar el pie al suelo por tener sensación de caer, ni hacerlo en primera. No es el único punto donde lo noté durante la ruta, pero sí el más importante porque son las que más se me atraganta(ba)n.
Hacer un curso de conducción con tu propia moto me parece una idea brillante. Ya sabes llevarla, sin periodo de adaptación, sabes cómo responden el acelerador, los frenos, tienes controlado su peso, es tu moto. Además, y quizá más importante, es la moto que luego vas a conducir, "para la que haces el curso", por lo que todo lo que aprendes no lo tienes que extrapolar después y adaptar. Como contra, es tu moto, y al menos en mi caso en el nivel I estaba aterrorizado con caerme y romper el carenado. En el curso nivel II me sentí relajado en ese aspecto probablemente por el tamaño del circuito, con medidas "normales" como lo que te puedes encontrar en una carretera, y además ya había roto el hielo con el nivel I.
Tenía prejuicios con los cursos de conducción en general. Pensaba que no eran para mí, que era algo enfocado a gente que quiere pilotar y/o "motos gordas". También tenía prejuicios respecto a la gente que iría a esos cursos y temor sobre estar en situaciones de riesgo (innecesario) porque se picasen o intentaran llevar la moto a tope o al límite, y acabar teniendo un accidente en un entorno teóricamente controlado.
La realidad que me he encontrado ha sido radicalmente opuesta. También en el curso nivel I los compañeros iban con una actitud absolutamente enfocada a aprender (no a medirse con los demás, mi prejuicio) y durante el curso no hubo adelantamientos, ni maniobras extrañas o peligrosas, respeto entre todos en todo momento.
Quizá el planteamiento de estos dos cursos que yo he hecho es la clave, no son cursos de conducción deportiva sino conducción segura. En mi opinión es una línea finísima la que separa estos dos matices, porque los errores que he corregido y las habilidades desarrolladas con los cursos también me permiten ser más rápido si quiero hacer conducción deportiva porque en definitiva son las mismas que se aplican en ese estilo de conducción.
Estoy un poco arrepentido porque debido a mis prejuicios no hice cursos cuando tenía la 125cc. Y este es el punto en que más hincapié quiero hacer porque creo que cometí un error. De hecho en este curso además de mi CBR500R asistieron una CB500X y un MT-03 y me sorprendió para bien, porque (de nuevo prejuicios) yo pensaba que iba a ser la moto más pequeña y mira por donde, no.
Si os lo podéis permitir (y en particular si sois de la zona de Valencia o alrededores) creo que cualquiera en 125cc aprovecharía mucho mejor el nivel I que los que fuimos, y también le sacaríais partido al nivel II, donde podríamos haber acelerado hasta los 150km/h según comentaron los instructores, pero es que ese no era el objetivo (ni la actitud) que llevábamos los asistentes. Yo creo que no pasé de los 80 o 90km/h más que en algún acelerón en las vueltas libres y solo por tantear. Creo que con la Hyosung hubiese hecho más segunda-tercera y con la 500 en casi todos los tramos iba en segunda variando rpm y solo metiendo tercera en las zonas algo más rectas (pero para ir recto no hace falta un curso de conducción, creo yo).
Si ofertan cursos de conducción en vuestra zona, preguntad a gente que los haya hecho, buscad opiniones por internet o lanzaros directamente a hacerlos. No veo el punto donde no vayas a aprender o al menos pasar una mañana entretenida. Seguro que haré alguno de los de pit-bikes que "venden" con la foto tocando rodilla y todo eso (y volveré a contaroslo, por supuesto), pero me parecen menos atractivos. Y desde luego si tenéis oportunidad de hacer los de esta autoescuela (autoescuela Gran Vía 46, en Valencia), puedo deciros que estoy muy satisfecho con ambos cursos y no puedo menos que recomendarlos.
Ahora sí, al lío.
En cuanto publicaron las fechas disponibles para el curso de conducción nivel II contacté para reservar mi plaza, y según se acercaba el día previsto (10 de Abril), que me encajaba perfectamente en los planes, no paraba de llover día sí día también. Fue aplazado. Podía salir para otra fecha intermedia pero tampoco el clima acompañaba, así que finalmente el curso se realiza el sábado 08/05/2021 en el Kartódromo Internacional Lucas Guerrero.
Quedamos a las 07:30, así que fue un buen madrugón. Estaba algo nublado pero pintaba que iría despejando con el sol a lo largo de la mañana (y así fue). Como me gusta llegar sobrado de tiempo a los sitios, llegué de los primeros y ya empecé a ver las motacas de la gente, trail, naked, deportivas, del A, limitadas y adoseras puras.
Unas indicaciones básicas, un café para quien gustase y a empezar a calentar. Si no me cuelo contando, 13 motos en pista incluyendo los instructores pero la verdad que yo me centré en mi grupo (tres cursillistas y un instructor) y no me enteré mucho del resto porque nos separamos dentro del propio circuito.
Este es el circuito. Salíamos desde la "línea de meta" donde se ve pintada la "parrilla de salida" (en la foto, abajo). Recta y enfrentamos primera curva a derechas, amplia. Le sigue una curva a izquierda no muy pronunciada y la chicane infernal jajaja. Después otras dos curvas a derechas que se podían enlazar bien y tres curvas a izquierdas que también se podían llegar a enlazar casi de una trazada aprovechando toda la pista. Llegamos a las cuvas finales y pequeña recta de la pista que acaba en una curva rápida a derecha terminando en otra chicane (no infernal) y la recta de meta.
Iniciamos el curso haciendo unas vueltas de calentamiento y conociendo el circuito, y la verdad que salvo la chicane infernal que se me atragantó todas esas vueltas, el resto me resultó manejable. Es cierto que antes de tener ninguna de las indicaciones de los instructores esas tres curvas a izquierdas que se podían enlazar de una sola trazada yo no las hice tan fluidas, y también iba inconscientemente memorizando ahora viene curva de este lado, ahora del otro, etcétera.
(Se ve un poco rara porque estaba nublado y he corregido el brillo regular)
Cuando paramos y nos dijeron que qué tal la toma de contacto inicial me faltó tiempo para decir que la primera chicane me la comía con doble de patatas y que qué tenía que hacer ahí. De eso trataba el curso en definitiva, de encontrarse problemas y aprender a atacarlos, así como corregir vicios, postura, mirada . . .
La chicha del curso fue estar allí, desde luego, pero en definitiva el objetivo era el mismo que el nivel I, mejorar nuestra posición en la moto, sobretodo de brazos, hombros y torso, y en particular de la mirada-cabeza que es la que "manda" al resto. En ese aspecto (de acuerdo con Carlos, el instructor)(instagram) debí retener mucho del curso nivel I porque aunque todavía me agarraba más de lo debido con los brazos, la mirada y la posición del torso eran las indicadas.
Mejorar la trazada es lo que más estuvimos machacando, la entrada a curva, dónde iniciar la maniobra, la colocación "en el carril", así como retrasar la frenada y adecuar la velocidad para tener también una salida rápida de curva. Aquí hubo mucho trabajo y de forma alternante nos poníamos detrás de Carlos para seguirle y aplicar sus instrucciones, correcciones sobre la marcha y alguna parada puntual para comentar alguna de las curvas con más detalle.
LA vuelta. Hubo un momento en que nos distanciamos del resto de motos Carlos y yo, y ya debíamos llevar más de una hora de curso, en que conseguí hacer al menos esa vuelta siguiendo de forma bastante precisa su trazada, frenadas, entradas a curva y a nivel de sensaciones fue brutal. Me setía fuera de mí jajajaja, una gran satisfacción de estar aprendiendo y aplicando lo aprendido correctamente. De verdad espectacular esa vuelta a rueda y manteniendo la distancia.
Hicimos el ejercicio de frenadas de emergencia. Consiste en tener unas referencias con conos y frenar primero solo con el pedal de freno trasero, después solo con maneta de freno delantero y después con los dos (primero toque al trasero, seguido de toque al delantero y aumentando la presión progresivamente intentando además que no salte el ABS en mi caso). Se me da mal eso de separar freno trasero y delantero en la frenada de emergencia porque me sale hacer la frenada como corresponde de forma automática, así que este ejercicio no me gusta jajajaja.
También hicimos zigzag de conos, pero en esta ocasión con más separación y por tanto algo más rápido.
Y para complementar los ejercicios de habilidad, estuvimos haciendo ochos con estilo inglés, pero con unas medidas más amplias que en el nivel I, se me dio regular las primeras, luego mejor, más fluido, pero es algo a seguir practicando.
Teminamos la parte de pista y nos fuimos a almorzar (no se me ocurrió sacar fotos, y conforme comía me di cuenta que necesitaba reponer fuerzas), y después rutita por carretera con indicaciones, pero ya algo más relajado. Nos dimos una buena vuelta! Y esta vez alargamos la ruta 5 motos incluido Santi con una CB650 en esta ocasión. Es sorprendente como cambia saber enfrentar un tipo de curva después de haberlo aprendido y trabajado en el curso; ahora puedo hacer mucho más fluidas esas curvas cerradas de 180º de giro, sin corregir cuatro veces, ni llevar el pie al suelo por tener sensación de caer, ni hacerlo en primera. No es el único punto donde lo noté durante la ruta, pero sí el más importante porque son las que más se me atraganta(ba)n.